sábado, 12 de febrero de 2011

Consecuencias de un aumento proporcional de adultos mayores

http://www.lagranepoca.com/stories/20110122/16454-falta-la-fuente-en-el-texto-consecuencias-de-un-aumento-proporcional-de-adult

Demógrafos alertan que será necesario un cambio en los hábitos de vida no saludables de la población para amortiguar las consecuencias negativas del aumento proporcional de adultos mayores

El director de la División de Demografía de las Naciones Unidas, Joseph Chamie, Ninoska Damianovic del Instituto Nacional de Estadísticas chileno (Chilena), Gladys Massé y Alejandro Giusti de la Dirección Nacional de Estadísticas Sociales y de Población (Argentinos) han alertado en sus informes sobre el aumento proporcional de adultos mayores.

Los demógrafos son científicos sociales que tienen como objetivo el estudio de las poblaciones humanas, específicamente, estudia estadísticamente la estructura y la dinámica de la población y las leyes que rigen estos fenómenos.

Según Leonid Gavrilov y Patrick Heuveline en su estudio Aging of Population de 2003 señalan que el aumento proporcional de adultos mayores es una de las más importantes tendencias mundiales del siglo y tendría un impacto cada vez mayor en distintos aspectos de la vida cotidiana, economía y salud de la población3.

El envejecimiento demográfico ha estado avanzando rápidamente en países industrialmente desarrollados, pero como explica Ninoska Damianovic en la publicación Población y Sociedad de 2008, en los países en desarrollo, si bien el aumento proporcional de adultos mayores ha comenzado tardíamente, tiene un incremento aun más rápido1.

Según Daminovic, un ejemplo de incremento mayor se puede observar en Chile. En 2050 se estima que Italia, Japón, España y Grecia serían los países más envejecidos, ya que los adultos mayores triplicarían en cantidad a los menores de 15 años. En la actualidad, estos 3 primeros países son los que tienen más cantidad de adultos mayores, con 1,6 por cada menor de 15 años. En otras palabras, en 39 años, el envejecimiento casi se dupli­caría en los países desarrollados, en tanto que en Chile, se triplicaría en igual período, llegando a tener 21 adultos mayores más, por cada cien menores de 15 años.

Pero como manifiesta Chamie en el reporte World Population Prospects en 2001, África será excepción dentro del mundo en desarrollo, porque el envejecimiento de la población es relativamente lento, debido a la baja esperanza de vida4.

Uno de los casos más alarmantes es el que presenta China ya que tal como exponen Gavrilov y Heuveline, en el año 1950 los ancianos constituían un 4,5% de la población, en el 2000 un 6,9% y se estima que para el 2050 alcancen un 22,7% de la población3.

Causas y consecuencias

Gavrilov y Heuveline exponen que se han identificado diversas causas para el aumento proporcional de ancianos, como la disminución de nacidos por familia, el aumento de la esperanza de vida, y en países pequeños, también han afectado las dinámicas migratorias.

Aún no se ha logrado dimensionar completamente las consecuencias. Se puede apreciar, que por ejemplo, el Ministerio de Salud chileno, al planificar los objetivos sanitarios de la época en 2002, se muestra preocupado por el enorme impacto que tendrá este cambio demográfico en el del perfil epidemiológico de la población. Ya que los ancianos tienden a tener enfermedades crónicas y costosas, como la hipertensión, diabetes o el cáncer, lo que implicará un enorme desafío para los sistemas de salud.

Según Gavrilov y Heuveline, otra consecuencia es la disminución de personas trabajando y el aumento de personas que son dependientes del cuidado de otros. Esto a su vez impacta en el crecimiento económico. Además, los adultos mayores, por lo general, poseen menores ingresos que la población en general, lo que redunda en un aumento de los índices de pobreza.

Los mismos autores explican en Aging of Population, que un aumento en la esperanza de vida, no necesariamente implica mejora en la calidad de ella, de hecho, como da a entender el informe World Population Prospects, el grupo de adultos mayores que ha aumentado más rápidamente son los que superan los 85 años y en especial los mayores de 100 años4, es decir, el grupo en que se concentra el mayor gasto en salud.

Es probable que algunos sistemas previsionales no den abasto y será necesario tomar medidas como los recortes en los beneficios, aumento del ahorro en previsión, retrasar el período de jubilación, aumentar los impuestos, o producir un endeudamiento masivo, algo que ya se ha podido observar en ciertos países europeos.

Una consecuencia menos evidente, según Daminovic del Instituto Nacional de Estadísticas chileno, es el cambio en las dinámicas familiares. Se disminuirá el número de mujeres en edad fértil, lo que fortalece la tendencia a la disminución de la natalidad. Además los adultos mayores tendrán un rol protagónico dentro del proceso de socialización primaria, especialmente las abuelas, ya que en general las mujeres viven más que los hombres.

Se puede especular, que en los países democráticos, los políticos deberán tomar en consideración las intenciones de voto de este creciente segmento de la población, por lo que se espera un cambio en ella, para adaptarse a esta nueva situación. En resumen, los adultos mayores adquirirán mayor importancia dentro de la sociedad, tanto dentro como fuera del hogar.

Hábitos saludables de vida

El aumento proporcional de la población de adultos mayores también tiene su lado positivo. Si la humanidad toma conciencia de la importancia que tienen las costumbres saludables de vida, como proyectó la Comisión Ministerial de Objetivos Sanitarios en Chile en 2002, la mayoría de las consecuencias negativas podrán prevenirse, e incluso, revertirse.

Según dicha comisión, es importante que la generación actual deje de tener malos hábitos como el sedentarismo y consumo de tabaco, alcohol, el exceso de sal, azúcar o grasas. Ya que de esta manera pueden prevenirse los infartos, el cáncer y otras enfermedades de gran complejidad.

Si los seres humanos comienzan a mejorar sus estándares morales, disminuyen sus niveles de estrés, amplían y profundizan sus relaciones sociales positivas, cuando lleguen a ser ancianos podrán vivir activa y vigorosamente hasta una edad mucho más tardía que en el pasado, y, como explican Gavrilov y Heuveline, si se los alienta a ser productivos, pueden ser colaboradores económicos3. Dentro de la sociedad también podrán desempeñar un papel positivo tanto en la familia como fuera de ella.

Los gobiernos del mundo paulatinamente están tomando conciencia de la necesidad de implementar programas preventivos, por ejemplo, en enero de 2011 el Ministerios de Salud y Educación chilenos se comprometieron a formar hábitos saludables en escolares. Pero los cambios fundamentales aún dependen de cada persona.